viernes, 23 de octubre de 2009
La Consagración de los cacahuetes salados en primavera, de Stravinsky y Charlie Parker
Autor: Juan Antonio González Fuentes - Lecturas[{0}] Comentarios[{1}]
Artes en Blog personal por Música
En 1951 Stravinsky se encontraba sentado y bebiendo en una mesa del célebre Birdland neoyorquino, mientras escuchaba tocar el saxo a Parker, el rey indiscutible del bebop. Dicen que cuando Parker se percató de la presencia de Stravinsky entre el público asistente, sin perder ni un ápice de compostura, comenzó a incorporar motivos de “El pájaro de fuego” (1910) a su interpretación del tema “Ko-Ko”


Juan Antonio González Fuentes 

Juan Antonio González Fuentes

Dicen que en el Nueva York de los años 1930 los músicos de jazz de Harlem se removían en los asientos de los antros en los que estaban cuando sonaba de alguna manera música de Stravinsky. Parece evidente que la única razón que puede hacer entender este caso es que el genio ruso escribía en un lenguaje que no les era del todo ajeno a los jazzmen neoyorkinos.



Grabación del 29 de septiembre de 1947 en la que Charlie Parker interpreta el tema "Ko-Ko" (vídeo colgado en YouTube por Ibelieveinjazz)

Siguen diciendo que cuando el gran Charlie Parker (el Bird que retrató admirablemente Clint Eastwood en la película de dicho título), llegó a París en el año 1949, para festejar el viaje y dar a entender a los parisinos que no estaban ante un ignorante musicastro de tres al cuarto, comenzó a tocar en su saxo alto las primeras notas de La Consagración de la primavera (1913) de Stravinsky en su solo del tema Salt Peanuts, es decir, Cacahuetes salados. Cualquier buen aficionado a la música de nuestros días seguro que daría al menos un cuarto de su alma al diablo por escuchar en el saxo de Bird esa mezcla tan explosiva y sin duda atractiva: La Consagración de los cacahuetes salados en primavera, de Stravinsky y Charlie Parker.



Stravinsky dirige a sus 82 años la interpretación de la suite "Lullaby" de El pájaro de fuego (vídeo colgado en YouTube por karthiktn)

Y continúan diciendo que dos años más tarde, en 1951, el maestro ruso, quizá el genio más célebre de toda la música del siglo XX, se encontraba sentado y bebiendo en una mesa del célebre Birdland neoyorquino, mientras escuchaba tocar el saxo a Parker, el rey indiscutible del bebop. Dicen que cuando Parker se percató de la presencia de Ígor Fiodórovich Stravinsky entre el público asistente, sin perder ni un ápice de compostura, comenzó a incorporar motivos de El pájaro de fuego (1910) a su interpretación del tema Ko-Ko. Y por último dicen, aseguran, que a un absorto, incrédulo, maravillado, Ígor Stravinsky, el güisqui derramado de su vaso y boca comenzó a recorrerle el traje como un líquido homenaje a la música más grande.

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Últimas colaboraciones (OCTUBRE) de Juan Antonio González Fuentes en la revista electrónica Ojos de Papel:

LIBRO: Luis García Jambrina: El manuscrito de piedra (Alfagaura, 2008)

CREACIÓN: La lengua ciega (DVD, 2009)

CINE: Isabel Coixet: Mapa de los sonidos de Tokio (2009)

-LIBRO (septiembre):  P.D. James: Muerte en la clínica privada (Ediciones B, 2009)

-LIBRO (julio): Stieg Larsson: Millennium 3. La reina en el palacio de las corrientes de aire (Destino, 2009).

-PELÍCULA: Niels Arden Oplev: Millennium 1: Los hombres que no amaban a las mujeres (2009).

Más de Stieg Larsson:

-Millenium 1. Los hombres que no amaban a las mujeres (Destino, 2008)

-Millennium 2. La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina (Destino, 2008)


NOTA: En el blog titulado El Pulso de la Bruma se pueden leer los anteriores artículos de Juan Antonio González Fuentes, clasificados tanto por temas (cine, sociedad, autores, artes, música y libros) como cronológicamente.