Director: Rogelio López Blanco      Editora: Dolores Sanahuja      Responsable TI: Vidal Vidal Garcia     
Historial de visitas

· Novalis o el corazón extranjero: Poemas tardíos (Linteo, 2011) (Visitas 1)
· José Miguel López García: "El motín contra Esquilache" (Alianza, 2006) (Visitas 1)
· Lugares comunes latinoamericanos: el largo brazo de la CIA (Visitas 1)
· Fernando Savater: "La vida eterna" (Ariel, 2007) (Visitas 1)
· Don DeLillo: El hombre del salto (Seix Barral, 2007) (Visitas 1)
· La Guerra Fría (Visitas 1)
· Entrevista a Yoly Hornes y a Francesc Mercadé, autores de Nosotros mismos (Visitas 1)
· Antonio Muñoz Molina: Días de diario (Seix Barral, 2007) (Visitas 1)
· Un puente sigiloso. Una lectura de “Lo que dijimos nos persigue” (Pre-Textos, 2013), de Nikola Madzirov (Visitas 1)
· El poeta José María Gómez Valero desvela Los Augurios del azar (Visitas 1)
· Pierre Bourdieu: Autoanálisis de un sociólogo (Anagrama, 2007) (Visitas 1)
· El Mephisto-Walzer del Concierto de Año Nuevo, pistoletazo de salida al año Franz Liszt (Visitas 1)
· Crítica de "Begin to Hope", CD de Regina Spektor (Visitas 1)
· Pilar Rahola y los osos independistas del valle de Arán (Visitas 1)
· El perro rabioso del barrio: el imperio Murdoch y el debate sobre la colusión entre políticos y prensa (Visitas 1)
· Aproximación al fascismo en Italia (Visitas 1)
· Los sin techo de Miguel Rubio: la vida después de la muerte (Visitas 1)
· Juan Manuel González Lianes: Quimera del lector absorto (Visitas 1)
· Los enunciados protocolarios de Álvaro Pombo (Visitas 1)
· Las balanzas fiscales de las Comunidades Autónomas: una concesión al nacionalismo (Visitas 1)
· Mike Figgis: El cine digital (Alba, 2008) (Visitas 1)
· Mojo, CD de Tom Petty and The Heartbreakers (Visitas 1)
· La izquierda ante el espejo (Visitas 1)
· Cuando se abrió la puerta. Cuentos de la Nueva Mujer (1882-1914) (Visitas 1)
· Alex Ross: El ruido eterno. Escuchar al siglo XX a través de su música (Seix Barral, 2009) (Visitas 1)
· El otoño de un ideal. El republicanismo histórico español y su declive en el exilio de 1939 (Visitas 1)
· Carles Riba: Elegías de Bierville (Visitas 1)
· La clase, película de Laurent Cantet (Visitas 1)
· El gobierno Zapatero propone sacar de su tumba los restos de Franco (Visitas 1)
· La Misión etnográfica y lingüística Dakar-Djibouti (1931-1933) y el fantasma de África (Visitas 1)
· Crítica de la película "Babel", del director Alejandro González Iñárritu (Visitas 1)
· Conflictos étnicos y gobernabilidad: Guinea Ecuatorial (Visitas 1)
· Studio 60 de Aaron Sorkin. Sobre televisión (Visitas 1)
  • Novedades

    Wise Up Ghost, CD de Elvis Costello and The Roots (por Marion Cassabalian)
  • Cine

    La cinta blanca, película de Michael Haneke (por Eva Pereiro López)
  • Sugerencias

  • Música

    Wrecking Ball, CD de Bruce Springsteen (por Marion Cassabalian)
  • Viajes

  • MundoDigital

    Por qué los contenidos propios de un web son el mayor activo de las empresas en la Red
  • Temas

    La verdadera dimensión de la amenaza terrorista  (reseña de Rogelio López Blanco)
  • Blog

  • Creación

    Poemas de Daniel Riu
  • Recomendar

    Su nombre Completo
    Direccción de correo del destinatario
Aaron Sorkin: <i>Studio 60 on the Sunset Strip</i> (Aaron Sorkin, NBC, 2006-2007)

Aaron Sorkin: Studio 60 on the Sunset Strip (Aaron Sorkin, NBC, 2006-2007)















Aaron Sorkin en mayo de 2009 (fuente: wikipedia)

Aaron Sorkin en mayo de 2009 (fuente: wikipedia)


Magazine/Cine y otras artes
Studio 60 de Aaron Sorkin. Sobre televisión
Por Carlos Abascal Peiró, martes, 4 de octubre de 2011
Sincero tributo al medio televisivo, Studio 60 on the Sunset Strip (NBC, 2006-2007), derribada en el vado comercial tras una temporada, exprime la ternura de su creador Aaron Sorkin (La red social, Algunos hombres buenos) hacia el legado histórico de la pantalla doméstica estadounidense. Series que recuperan cierta dimensión del televisor predigital, familiar: uno invitaría a lo que fuese y sin dudarlo a buena porción del reparto. Aquel lugar donde todos saben tu nombre, resumió sabiamente Cheers.


A Sorkin, Aaron Sorkin, le va la televisión, se sorprendía The New Yorker. A nosotros –campo contrario, puñetero share- también, cada vez más. Siempre y cuando sea suya, de algún otro. Porque conviene revisar la adulterada semántica del término, remover estiércol, zappear la fascistoide algarabía de los ídolos -afinaba valiente Ramoneda- para sumergirla así en esa afonía oficiosa del traslado horario, seña última del receptor sensato. En la rehabilitación catódica –necesaria- se impone recuperar la corte cablera de nuestro tiempo (HBO, AMC, etc), la herencia referencial del televisor norteamericano o, ya entrados los sesenta, la irrupción del auterismo europeo (Rossellini, Fassbinder, el Assayas más reciente), otras quimeras. Cuando consumir televisión se admitió como disculpa.

A ello suma esfuerzos la excelente Studio 60 on the Sunset Strip (Aaron Sorkin, NBC, 2006-2007), rescate obligado según la arqueología televisiva de la última década, auténtica pieza de culto castigada por registros, anunciantes, desaparecida en el combate de los números apenas completó una temporada, veintidós capítulos. Aaron Sorkin, enésimo héroe en la jugosa cantera hebrea del talento, hilvanaba un estimulante ejercicio de ingeniería narrativa, de pulso dramático bajo techado NBC, la network que dejó madurar su ya canónica El ala oeste de la Casa Blanca (The West Wing, NBC, 1999-2006), la misma que –tiempo atrás- anotó su nombre mientras se fogueaba en la preproducción de la simpática Sports Night (ABC, 1998-2000). Eco en la ficción del legendario Saturday Night Live, Studio 60 alumbra la trastienda del prime time -o la complejísima síntesis de un late-show basado en sketches cómicos- y el cosmos febril que, bajo el cielo autografiado de LA, reflectores, hormiguea tras sus cámaras: eléctricos, actores, guionistas, una acelerada lección de gramática y jerarquía televisiva. Vivir en el aire.

Como sucede en la buena ficción, no supone ningún reto cifrar el afecto que Sorkin y su equipo vuelcan hacia sus criaturas, cosidas mediante retales autobiográficos, rastro genético de los productores del show, al fin y al cabo hábil caricatura de las fobias y aristas sorkinianas: Danny Tripp (Bradley Withford) –superviviente de pastillas, cocaína, un matrimonio- y Matt Albie (Mathew Perry), o cuando el inolvidable Chandler –en otra vida, la de Friends- acertó a ligar e incluso puso precio a sus chistes. Producto post 11-S, ciclo Bush junior, Studio 60 introduce a modo de ráfagas -insertas entre brillantes planos-secuencia ‘walk & talk’ (literalmente, caminar al tiempo que se habla)- agudas sátiras del poder, estaciones de un discurso que constituye una evidente toma de partido respecto al medio: progresista (léase demócrata), cualitativa. Esto es, disparaderos para una sólida crítica al reaccionario estatuto del entramado audiovisual norteamericano, a la infame (sub)cultura del reality y otras infecciones. Materia de examen, urge –por otro lado- conservar en la memoria el explosivo arranque que inauguraba el piloto, un despliegue de afinidades con el recuperable clásico de Lumet, Network (1976). Todo un aviso.

Suprimida una vez se hicieron efectivos los códigos de mayorías, queda interrogarnos por cuál habría sido el destino de Sorkin y su Studio 60 bajo el resguardo de una cadena de cable, conforme a sus espaciadas hojas de ruta, al tiempo laxo que refugió a –por ejemplo- The Wire. No hubo lugar para Studio 60. Y según aquella tiranía creativa que los anunciantes dan en llamar(nos) cuota de pantalla, los vales de canjeo cada vez se parecen más a Sálvame.



Tráiler de la serie de Aaron Sorkin: Studio 60 on the Sunset Strip (Aaron Sorkin, NBC, 2006-2007)
  • Suscribirse





    He leido el texto legal


  • Reseñas

  • Publicidad

  • Autores