Woody Allen: <i>Midnight in Paris</i> (2011)

Woody Allen: Midnight in Paris (2011)

    GÉNERO
Cine

    TEMA
Crítica de la película Midnight in Paris, de Woody Allen (por Eva Pereiro López)

    FICHA TÉCNICA
Países: España y USA. Año: 2011. Duración: 94 minutos. Género: Comedia romántica, fantástico. Reparto: Owen Wilson (Gil), Marion Cotillard (Adriana), Rachel McAdams (Inez), Kathy Bates (Gert), Michael Sheen (Paul), Adrien Brody (Salvador), Nina Arianda (Carol), Mimi Kennedy (Wendy), Kurt Fuller (John), Carla Bruni (guía del museo), Léa Seydoux (Gabrielle), Tom Hiddleston. Guion: Woody Allen. Producción: L. Aronson, S. Tenenbaum y J. Roures. Fotografía: Darius Khondji. Montaje: Alisa Lepselter




























Magazine/Cine y otras artes
Midnight in Paris, película de Woody Allen
Por Eva Pereiro López, miércoles, 1 de junio de 2011
Woody Allen llega puntualmente, un año más, a su cita con Midnight in Paris, su nueva comedia – sumando ya van 42 películas, nada menos, y la próxima, en Roma –, tan romántica como nostálgica, rodada en la capital francesa con un buen puñado de excelentes actores, rodeados de las más típicas imágenes de la ciudad por donde discurrirán las tribulaciones de los protagonistas. Dentro de su ciclo europeo, ésta es, hasta el momento, su mejor comedia, así como Match Point (2005), con Londres de telón de fondo, fue su mejor tragedia. Pero no se engañen ustedes, a pesar de lo expuesto en estas pocas líneas en negrita, sigan leyendo porque Midnight in Paris se alimenta de un nuevo manantial: la fantasía.


Gil (Owen Wilson) e Inez (Rachel McAdams) forman una pareja joven a punto de casarse. Están de paso en París, junto a los padres de ella (Kurt Fuller y Mimi Kennedy), unos republicanos que ven con buenos ojos el movimiento Tea Party, escasamente francófilos y a los que su futuro yerno no acaba de convencerles por "comunista". Ella desea pasárselo bien unos días, regresar a California, casarse y vivir en Malibú. Mientras, él sueña con deambular por las calles de París buscando la inspiración que le permitirá abandonar por fin su mediocre e insatisfactorio trabajo de guionista en Hollywood para dedicarse a lo que realmente anhela, convertirse en un gran escritor.

No tardamos en darnos cuenta de que en la pareja existe una fisura palpable que ha nublado el enamoramiento –un tema recurrente en los films de este inagotable zorro viejo (Conocerás al hombre de tu vida en 2010, Whatever works en 2009 etc.)-, que se va acentuando a medida que trascurre el metraje y que la presencia de los suegros no hace mas que empeorar. Pero la situación tomará un nuevo giro tras el encuentro casual con Paul (Michael Sheen) y Carol (Nina Arianda).

Paul, un antiguo amigo de Inez, está participando en unas conferencias en la Sorbona y les propone visitar juntos la ciudad. Por desgracia para Gil y bajo la mirada deslumbrada de Inez, Paul es un pseudo-intelectual pedante experto en todo, al que le gusta escucharse sin pausa disertando sobre las esculturas de Rodin, los nenúfares de Monet o las excepcionales cosechas de vino francés. Pero pronto Gil se descuelga del grupo cuando una noche decide dejarse llevar por sus pasos y recorrer esa ciudad de ensueño y fantasía tantas veces imaginada, que fue capital cultural indiscutible en los famosos años 20, excepcionales années folles, y que tantos intelectuales estadounidenses abrazaron en aquella época.

Todo tiempo pasado fue mejor, y como Gil, tendemos a idealizarlo por insatisfacción con nuestra vida presente: quisiéramos haber vivido aquella época dorada que marcó sustancialmente la historia cultural y soñamos con encontrarnos con los artistas admirados. Como dijo Faulkner, “The past is never dead. It’s not even past”. Así que aquí llega la mayor sorpresa de todas: Allen transforma su comedia romántica y melancólica vistiéndola de fantasía y en un pliegue temporal mágico, al igual que en La Cenicienta, al tocar las campanadas de media noche, Gil es transportado a esos años efervescentes y anhelados para encontrarse con sus álter ego: Scott y Zelda Fitzgerald (Tom Hiddleston & Alison Pill), Hemingway (Corey Stoll), Cole Porter (Yves Heck), Picasso (Marcial di Fonzo Bo), Gertrude Stein (Kathy Bates), Dalí (Adrien Brody), Buñuel (Adrien de Van), Man Ray (Tom Cordier) y T.S. Eliot (David Lowe) entre otros, además de la bella Adriana (Marion Cotillard), última musa del momento de Picasso y antigua amante de Modigliani, de la que caerá perdidamente enamorado.

Por desgracia y muy a su pesar, Allen nos dice que la única forma de hacer arte de verdad, de dejar huella, es comprometiéndose unívocamente con su época y que la nostalgia, dulce, ciertamente, no es mas que una irremediable pérdida de tiempo. Y los gags fluyen de forma brillante, pasando de una época maravillosa a otra. Adriana arrastrará a Gil a La Belle Époque (1890), esencialmente vital según ella, y en Maxim’s, famosísimo restaurante de entonces y de ahora, se cruzarán con Toulouse-Lautrec (Vincent Menjou Cortes), Degas (François Rostain) y Gauguin (Olivier Rabourdin) que, a su vez, anhelan haber vivido el Renacimiento, ya que según ellos, nunca hubo época más importante.

Y Midnight in Paris es sencillamente un buen Borgoña que muchos espectadores sabrán apreciar con regocijo.



Ttráiler de Midnight in Paris, película de Woody Allen (vídeo colgado en YouTube por decineyseries)